Grupo Asobe: LAS MIL Y UNA NOCHES

jueves, 21 de febrero de 2008

LAS MIL Y UNA NOCHES


Las mil y una noches estuvieron hechas para mí: una para pensar en ti, y mil para olvidarte.
Esta en concreto completa las mil y una, así es que por fin, mañana me libraré de las cadenas que yo misma me ato a tu persona; y las siguientes noches, Dios sabe lo que haré. Locuras, supongo.
Pero querido, (y para mañana ni si quiera una pizca) hoy me toca escribir sobre ti; sobre cómo, noche tras noche, (mil y una en concreto) te colabas en mi mente y me impedías pensar en cualquier otra cosa. Porque era éste mi destino, que quizás yo solita me forjé; porque van mil, y con ésta mil y una; y porque quizás me equivoque y sume las mil y dos.
Odio todo esto, pero los momentos frustrantes debajo de las sábanas, llorando todo un río, pasarán a la historia jamás contada. También te odio a ti, y sabes que no soporto idealizarte, por eso de vez en cuando una oleada de miradas odiosas contra ti te acechan cada vez que te veo pasar; pero debo admitir que no es el odio lo contrario al amor; sino la indiferencia… odiar a alguien es darle demasiada importancia, así es que podríamos decir que todavía me importas lo suficiente como para odiarte;. Pero cada vez se acerca más la cuenta a atrás; cada vez queda menos para olvidarte, cada vez queda menos para rellenar estas páginas en blanco con mis pésimas y frustrantes palabras, y cada vez queda menos para que luego yo las lea con más detenimiento y comprobar que ya no me acuerdo en qué podría haber estado pensando antes. En ti, quizás. Y decirme que para mí tú ya no eres nada, (y hacer como que me lo creo), y comprobar que yo para ti no soy nadie (y dibujar la tristeza en mi mente porque además de creérmelo, es totalmente cierto).
Porque sólo quedan veintiocho segundos para acordarme de tus cabellos brillantes, y ahora veintisiete para acordarme de qué maneras de superioridad, te lo tocabas y desmelenabas. Porque ya no seré la que finja una sonrisa falsa e idiota cada vez que te vea, porque cuando pases ya no sabré quién eres.
Diecinueve segundos que marca la aguja del reloj, y en cada “tic-tac” me imagino el pestañear de tus ojos, y cómo los míos, desorbitados, te contemplan.
Ahora sólo seis para acercarme más al olvido, a tu olvido, a no volver a saber de ti.
Tres, dos, uno… ¡TIEMPO!

… ¿Qué os estaba contando?

Laura Martínez García.

11 comentarios:

*GeRi* dijo...

Que lindo!!!.. me ha encantado, ojala fuera asi de cierto..
Me identifico muchisimo...

Gracias por pasar, seguimos en contacto.

Besos.

Paulina dijo...

Este escrito está genial!!!
Las palabras precisas, q calzan perfectamente para retratar ese sentimiento...el cual me identifica, de cierta manera.
Saludos!!!

Anónimo dijo...

Me identifico plenamente contigo. Desde hace dos días estoy dentro del más profundo pozo de penas malvadas... Y eso me pasa por ser la ingenua y la imbécil que nunca exige nada a los demás y se sacrifica por todos ellos. Ahora estoy sumida en una relación de la que no quisiera salir nunca, porque acabaría mi vida, pero no sé qué clase de relación es... Ni siquiera qué somos él y yo. Triste, pero bueno, mejor aceptarlo. ¿El qué? Que no me querrá nunca como yo le quiero a él, que por verle feliz moriría mil y una veces.
1beso!

Adriana dijo...

lau eres un crack:
no se como consigues escribir cosas tan bonitas y con tanto sentimiento.


saludos

Matías Irarrázabal dijo...

Abriste la puerta a tu mente inmaginativa que se perturba por ideas y sentimientos y que le sirven de inspiración para futuras creaciones

saludos cordiales

Unknown dijo...

Muy bueno realmente y ojalá fuese así de fácil, pero yo puedo decirte que muchas veces pasamos una noche que para nosotros son como mil o como dice un amigo "la noche que duro 6 años... o más".
Si, cuando a uno le han hecho pedazos el corazón y hay que armarlo de pieza en pieza si es complicado tener en cuenta que cada segundo que pasa es un martirio... aunque lo más oscuro de la noche es justo antes que inicie el alba.
Uno se muere con la suya, siempre pensando que cuando pasen esas mil y una noches en nuestro caminar diario encontraremos a esa persona especial que nos ilumine el día con una sonrisa y nos haga pasar otras mil noche queriendo olvidarle.
Saludos.

Anónimo dijo...

Gran escrito..Palabras que se deslizan en favor de la historia. Y la vida es simplemente eso. Deslizarse por todo tipo de sentimientos..Besosss de loki vinodelfin!!!

Itten dijo...

El tiempo sin ti es... empo

Javier E. González dijo...

muy buen blog. Saludos desde Tucumán, Argentina.

tucumanindependiente.blogspot.com

EteAN! dijo...

Holas!!
si, es dificil pensar cuando se te cae el coraxon y se te rompe... tambien lo he experimentado, pero creo tambien que todos tenemos un norte que mirar... y algo mas... alguien que te hace llorar, no merece tus lagrimas, pues si te quisiera, sabria que eso duele, y no lo haria.
COn toda humildad lo digo...
me gusto el blog... harto de todo,

Franco Mar dijo...

"pero debo admitir que no es el odio lo contrario al amor; sino la indiferencia…"

buenísimo che, lo más cierto que he escuchado en muchos dias.

mucha suert!

Publicar un comentario

Para ser parte de nuestro Staff, y discutir temas de relevancia, contáctese al mail asobe@mailcustody.com