Grupo Asobe: Seamos capaces de mirar hacia el futuro.

domingo, 10 de febrero de 2008

Seamos capaces de mirar hacia el futuro.

La situación de la renuncia del ex general Santelices del ejército, me ha interpelado a comenzar a escribir este comentario. Pese ha existir más de 30 años que nos separan de la etapa tan oscura y polémica de discutir hasta el día de hoy, todavía no es posible mirar hacia el futuro dejando atrás el odio y rencor que se produjo producto de la violencia provocada en el pasado.


Es cierto, como sociedad hemos avanzado, esto concretizado en el hecho, que actualmente es posible reconocer cual es mi posición política y discutir amistosamente nuestras diversas posturas, producto que se incentivado el pluralismo en todo los estratos de la sociedad. Sin embargo, el hecho de juzgar a un militar que en la época del golpe militar o pronunciamiento militar, que en ese entonces todavía no tenía la mayoría de edad, ya que en ese tiempo la mayoría de edad se obtenía al cabo de cumplir los 21 años .

El coronel Gonzalo Santelices -en ese entonces- debido a la normativa establecida en el código de justicia militar, el sólo de hecho de oponerse a la desición de su superior le hubiere válido la muerte, debido a la situación de conmoción política claramente contextualizada. El haber tenido la osadía hubiera sido una actitud digna de un mártir, pero nadie podría haberle exigido que a costa de su propia vida efectuara tal acción heroica. Por otro lado, según lo que informa la prensa, en específico la sección de Reportajes de las páginas de la Tercera domingo, hace hincapié en la actitud del militar de cooperación en la investigación, en ningún momento ha negado los actos, dejando entrever la injusticia de la situación al tenerse que verse obligado a pagar los platos rotos de otras personas, que en específico son sus superiores, quienes tienen toda la responsabilidad del alcance de sus ordenes.

Debemos avanzar en un acuerdo más radical, como lo declara el ex comandante en jefe del Ejército Juan Emilio Cheyre en una carta abierta publicada por la prensa en el día de hoy, en la cual destacó la siguiente cita:

“Por esa experiencia y numerosos hechos que veo con inquietud en el presente, con respeto propongo, a quienes tienen la potestad de legislar, que propicien una iniciativa para resguardarnos de procesos que echen por la borda todo lo avanzado. Una ley que ratifique el triunfo del entendimiento sobre intereses de minorías que buscan revivir el odio. Veo con preocupación señales que abandonan la fórmula de que ninguna de las partes busque aniquilar a la otra o erigirse como única poseedora de la verdad”.

Estoy de acuerdo a que se pretenda precaver futuros entuertos regulando en una ley, en lo que sería un acuerdo de todos los sectores de la sociedad. En donde todos los actores políticos se comprometieran a que a que toda persona que tuviera algún tipo de participación en los hechos ocurridos en la etapa del país 1973 a 1990 se marginaran de poder entrar algún cargo político, lo cual, debería ser extensivo no sólo a la gente que estuvo involucrado al gobierno militar sino que también a la gente que tuvo involucrada en los guerrillas en la lucha por la democracia u cualquier tipo grupo de presión. De este modo ya no habría en el gobierno, en el senado ni en el poder judicial personas que tengan un grado de resentimiento, que lamentablemente no dejan mirar el futuro, porque existe todavía problemas que siempre nos remontaran hacia el pasado, que tanto para un sector como para el otro estuvo caracterizado por el sufrimiento y la tristeza. Y de este modo, seamos capaces de mirar hacia el futuro.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Saludos desde xemillon.blogspot.com hace bastante que no actualizo mi blog, hoy serà la excepción, tu comentario me recodó que aun existen lectores/observadores.

Adiós! Gracias.

Álvaro P. dijo...

No conozco mucho del tema, por lo que quería preguntar ¿qué habían hecho las personas fusiladas? Los militares no eran personas que gozaran matando gente, así que lo más probable es que los condenados no hayan sido blancas palomas, y que la condena a muerte haya sido la única solución posible en esos casos.
Saludos,
Álvaro P.

Anónimo dijo...

Como bien se argumenta, el general santelices en esa epoca ni siquiera era mayor de edad.

Para que un hecho delictual sea punible, se debe dar un actuar libre del sujeto activo, del actor. Yo opino que los militares que actuaron pr ordenes de superiores no actuaron con la debida libertad, puesto que su vida estaba en juego.

Es cierto que en tiempos de normalidad, opera en la justicia militar la obediencia reflexiva, es decir, si un subordinado es obligado a realizar un acto que se riñe con la legalidad vigente puede representarselo a su superior; esa es la unica forma de eximirse de responsabilidad...

... pero el acto debe ser cometido de todas formas!

Creo que solo el tiempo curara las heridas y hara decantar la objetividad que proporcionara la historia como ciencia.

cristian dijo...

Matthew, Todavía no es posible mirar hacia el futuro dejando atrás el odio y rencor que mantiene vivo la izquierda producto de la violencia provocada en el pasado.
Los hechos son muy claros. ¿quiénes han impedido la reconciliación en Chile, y quiénes impiden que se dejen atrás las odiosidades políticas del pasado?
¿Quiénes siguen, consistentemente, echándole sal a la herida, y exigiendo más que justicia, venganza?
¿Quiénes han sido incapaces de hacer una autocrítica, o pedir perdón, por su cuota -fundamental- de culpa en los hechos que desembocaron en el 11 de septiembre de 1973 y que luego les rebotaron en la cara como un boomerang?
¿Existen asociaciones de Familiares de Victimas del Terrorismo echándole sal a la herida y realizando cazas de brujas sobre los terroristas de izquierda, quienes, en casi su totalidad, están libres?
¿Quienes realizan apremios ilegales como las FUNAS y consiguen expulsar a gente de sus trabajos o cortar sus carreras por meras sospechas?
¿Quiénes han recibido millones de pesos fiscales por ser victimas de violaciones a los DDHH, sin haberse investigado nunca sus delitos anteriores?
¿Quiénes continúan protegidos por la ley de Amnistía de 1978, y quiénes no?

En resumen ¿Quiénes mantienen abierto permanentemente el clima de odio y rencor entre un 5 y un 95% de los chilenos que no sufrieron ningún daño con el Gobierno Militar?
Si una ideología se basa en el odio (de clases), ¿cómo puede sobrevivir si no mentiene vivo dicho odio y resentimiento en la sociedad?

Matías Irarrázabal dijo...

Rodrigo solo comunicate al mail que sale en el blog, de todas formas ya te he agregado al msn para conversar

muchas gracias por sus opiniones y demás esta decirle al que quiera integrarse solo envie un mail o me agrega al msn

saludos cordiales.

Pau dijo...

Leyendo el artículo anteriormente en la prensa, este incidente me recordó, guardando las proporciones, la película "A few good men" - 1992 (Pocos hombres buenos), protagonizada por Tom Cruise y Demi Moore. En esta película, ambos son abogados militares y deben defender a dos marines acusados de haber matado a un compañero por violar "un codigo de honor" de la marina, haciendo creer que había sido un accidente. La defensa de los inculpados se basa en que estos jóvenes militares (de no mas de 20 años), habían recibido ordenes de un comandante(interpretado por una genial actuacion de Jack Nickolson). La defensa se complica cuando estos notables abogados (Cruise y Moore) deben probar al jurado que efectivamente hubo un crimen y que fue ordernado por este comandante. Agotadas las instancias de la investigación, no queda más. para ganar el juicio, que lograr obtner una declaración de la propia boca de este alto oficial, citado al podio como testigo, para que reconzca su culpabilidad al admitir que de él había emanado la orden de "eliminar" al marine, declaración que es obtenida por la gran locuacidad de parte del abogado interpretado por Cruise, y atormentado por la presión, casi sin quererlo, el comandante interrogado en un acolarado discurso sobre la honra y la jerarquía militar, admite haber ordenado la muerte de un subalterno. El jurado, encuentra inocentes del cargo de asesinato, a los marines inculpados, sin embargo, los declara culpable por no haber puesto "en tela de juicio" una orden que significaba terminar con la vida de un ser humano, por lo que se les ordena la baja inmediata y deshonrada de las filas de la Marina. Si comparamos la parte final, de este film de principios de los noventa, con el caso del Gral.(R) Santelices, bien podría hoy también ser juzgado, quizá no por su participación directa en los crémenes de los que se le acusa, pero si por su responsabilidad moral de no haberse cuestionado la falta de humanidad ante los atropellos y abusos cometidos en esa época por parte de la represión militar. Aquí cabe mencionar el silencio guardado por Santelices durante más de 29 años, sobre este crimen y cabe preguntarse, finalmente, si la carrera militar fue para él más importante que sus valores ???
Saludos,
PAU

J.B. dijo...

de partida, no se puede dejar atrás el odio mientras los personajes que participaron en la muerte, tortura y persecución de personas sigan ostentando cargos públicos, ya sea en el ejército o en cualquiera de los poderes del estado, y sigan impunes en sus casas, con sus familias, mientras otras familias se vieron destrozadas por la culpa de sus cobardes asesinatos.
segundo, si bien Santelices y otros oficiales y suboficiales de ese entonces fueron "obligados" a matar, eso lo determina el tribunal guiándose por el concepto de la obediencia debida que en otros países como Uruguay y Argentina se les eximió de cargos a quienes luego de cometer los asesinatos forzados, renunciaron a un ejército corrompido por la violencia hacia sus compatriotas y brutalizado por el "contexto". Asi como lo hicieron muchos militares que al ser obligados a matar renunciaron a las filas y denunciaron posteriormente a sus superiores, deberían haber echo los milicos que actualmente estan siendo juzgados ya que estos no solo callaron las muertes sino que se mantuvieron en sus cargos y mas encima siguieron subiendo de grados militares hasta ostentar importantes cargos en el ejército actual.
tercero: ¿y sus superiores? han sido juzgados? porque todavia guardar un silencio cómplice y de una vez por todas no los denuncian y denuncian a todos los que participaron en las masacres?
cuarto: si dices que se marginaran de algún cargo político personas que tuvieron q ver con hechos en la dictadura, todos los politicos de derecha (actualmente senadores, diputados, alcaldes, etc) que apoyaron a la dictadura deberían ser excluidos de estos cargos ya que participaron directa o indirectamente en la matanza de personas por motivos politicos.
por eso, mientras exista este tipo de gente caminando libre por las calles: SIN PERDÓN NI OLVIDO!!! (igual se puede seguir mirando al futuro, pero nunca olvidar el pasado, menos un pasado tan presente)

Matías Irarrázabal dijo...

Para mirar al pasado se debe dejar sanjado a la totalidad los problemas, y los rencores personales. Es deber de todos hacer un compromiso que nos involucre a todos como sociedad y transando por el futuro. No puede ser que todavia exista odia y rencor en personas por lo demas es entendible que la tengan, pero no es justificacion para iniciar una casería de brujas..entendeamos que todos sufrimos.. para repeler de alguna forma esta sensación es vital para ello es vital que las personas que sufrieron la perdida de uno de sus suyos conocozca la verdad.

Otro punto que me gustar reiterar al momento de juzgar tenemos que tener claro que en la época no existia la tranquilidad que tenemos ahora, si bien es cierto en estos momento en democracia el subordinado en el ejército puede hacer uso de la llamada obediencia reflexiva, en ese instante no era posible, debido a al caos que pasaba el país, el valor de la diciplina y la obediciencia tiene que estar al bien presente.

saludos cordiales a los que han opinado
les agradesco la altura de miras

cristian dijo...

O sea, j.b, que si se puede dejar atrás el odio mientras los personajes que participaron en la muerte de `personas a travès de actos terroristas sigan ostentando cargos públicos o cargos diplomàticos, ya sea por ejemplo como ministros del actual gobierno, reciban millonarias pensiones y apoyos economicos de paises y ONG extranjeras y sigan impunes en sus casas, con sus familias, mientras otras familias se vieron destrozadas por la culpa de sus cobardes asesinatos.

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